Etiquetas

viernes, 29 de junio de 2012

Dia 24. Orchha.


 Luego de un nutrido desayuno que incluyó tostadas y el mejor brownie del mundo en el Clarks Shiraz, nos aventuramos  con mi guía Dipa a recorrer los 235 kilómetros que nos separaban de nuestro próximo destino Orchha.

Salir a la carretera significó nuevamente recorrer vías principales, caminos secundarios y senderos, recogiendo estas bellas imágenes del ritmo de una vida que transcurría apacible y a ratos caótica frente a la ventana trasera del auto.


Pasamos por la ciudad de Gwalior, de ritmo acelerado y ambiente mayormente universitario, pero de un tránsito infernal. Dipa, quien siempre había sido muy calmado, no paraba de tocar la bocina... pero yo seguía disfrutando a mi ritmo las vistas desde mi asiento ...





Pasamos por la ciudad de Jahnsi y llegamos pasada la una de la tarde al hotel Bundelkhand Riverside (www.bundelkhandriverside.com) que era realmente hermoso, sobre todo por la arquitectura inspirada claramente en el estilo Portugués, las flores, los cuidados jardines y mi pieza, con balcón con vista al río Betwa.






Almorcé en el mismo hotel una ensalada muy bonita (nabos, tomate, zanahoria y pepinos), una porción de roti y chai (350 rupias).

Los garzones muy amables y curiosos, me preguntaron de todo, pero también se dieron tiempo para explicarme la diferencia entre los diferentes tipos de pan (Chapati, Roti y Naan) y los nombres de los distintos alimentos (papa: aloo, coliflor: Ghobi, lentejas: Dal). 



Partimos con Dipa a las 16:00 horas a recorrer este pueblo de menos de 10.000 habitantes, situado al lado del río Betwa y que sirvió de capital al antiguo reino de los Bundela.

Iniciamos el recorrido luego de pagar la entrada de 275 rupias, en el Palacio Fortaleza erigido sobre una isla. Está conformado por varios edificios y pabellones, comenzando yo en el Raj Mahal, donde se destacan las maravillosas pinturas de sus techos, intactas no obstante datar de 1531.




El lugar el precioso, aun cuando es muy solo, y se conserva sólo la estructura de sus muros ...



Desde allí se obtiene una vista espléndida al pueblo y a otro de los edificios icono de la ciudad Laxmi Narayan...




Luego de caminar largo rato por esa soledad crucé la explanada que los separa hacia el Jahangiri Mahal del cual también se mantiene únicamente  su estructura exterior, sus orgullosas cúpulas y algunos de los azulejos que dan cuenta de su antiguo esplendor palaciego, hoy completamente desmantelado. 





Recorrí ese coloso en total soledad tratando de imaginarme su ritmo en el siglo XVI, cuando bullía en actividad real... hoy solo es testigo del paso del tiempo ...






Caminé tranquila por los pasillos, disfrutando del sol y del silencio ....


Desde el punto más alto pude disfrutar una vista hermosa al río, rodeado de frondosa y verde vegetación y de los cenotafios erigidos en sus orillas que le han dado la fama a esta ciudad ...




Cuando iba ya saliendo me encontré con un hombre de un pelo rojo muy peculiar que me invitó a señas a seguirlo a unas dependencias cerradas ... decidí caminar detrás de él, y entramos  a una especie de museo, lleno de estatuas antiquísimas hechas en piedra de Surya, Shiva y Parvati.


Además habían varios pilares Sati, esculpidos en honor de las viudas que se arrojaban vivas a las piras funerarias de sus maridos, cegadas por la imposibilidad de vivir sin su amor ... pasando a la eternidad junto a ellos....

El hombre me explicaba a señas, pero yo igual le entendía, nos despedimos sonriéndonos, yo agradecida de su tiempo y disposición y él feliz con unas rupias que le entregué (nunca supe cual era la suma adecuada, solo me quedaba con el sonriso-metro... si al despedirme la sonrisa era grande el tip había sido bueno ...)


Desde estos hermosos edificios nos fuimos al río a ver su actividad ... había mujeres lavando, hombres charlando, y un Sadhu perfecto, quien me dio su bendición... todo era maravilloso, salvo por el olor a orina....



Dipa me advirtió que algunos falsos Sadhus motivados por el creciente numero de mujeres que viajan solas, han ampliado su oferta desde bendiciones a favores sexuales, así que había que afinar el ojo con ellos ...  el que estaba allí miraba tranquilo el correr del río, afortunadamente sólo me sonrió y bendijo sin segundas intenciones ...

 

Con el sonido del rio, solo quedaba empezar a disfrutar del atardecer ...



Nos movimos con Dipa hacia el sector de Kanchana Ghat, donde se erigen las tumbas de los antiguos gobernantes llamados Chhattris y nos quedamos mirando hipnotizados el atardecer perfecto, con el sonido del río.




Caminamos de regreso al pueblo, a los alrededores del Templo principal, encontrándonos con gente alegre que me saludaba animada y curiosa ...



Paramos antes de llegar al templo de Ram Raja, en una plaza cuyo comercio ebullía a esa hora, habían varios puestos de dulces y pasteles para ofrendar, tierra de color y moldes para teñir telas y algo de artesanía. 



Me senté fuera del Templo, dedicado a una de las reencarnaciones de Vishnu, Dios Preservador, rodeado de hombres santos y fieles que preparaban sus ofrendas y me dediqué a observar tranquila el mundo pasar ante mis ojos ... 

                                            



El comercio fue un verdadero chiste ... intenté comprar algunas cosas, pero sólo conseguí risas: le pedí al vendedor un camello calado, al cual se le inserta un algodón empapado en aceite por el estómago, para que salga aroma cuando el viento pase por su lomo enrejillado; el punto es que el me pasó un elefante, y cuando le pedí un caballo me pasó un dragón... no sé que pasaba que no nos podíamos comunicar, y solo podíamos reír ...

Terminé la transacción con dolor de estómago de tanto reír, con mi cara pintada, con  una tobillera que no necesitaba y con varios timbres que me regalaron para que no los olvidara ...


Me quedé largo rato con ellos, oficiando además de traductora con los otros pocos turistas que se reían también animados ... ya experta en las artes de la negociación hasta les conseguía descuento....



... Y vi todos los colores del mundo ....



Seguí recorriendo el bazar  donde no habían muchas novedades, aun cuando me ofrecieron un masaje en esta peluquería por 50 rupias ...



Volvimos al hotel, donde había una fogata hermosa, alrededor de la cual estaban tocando música en vivo ... realmente lindo ...



Luego de comer algo rápido, volví a la habitación, donde sonaba acompasado el paso del río, estaba en total calma hasta que apareció una lagartija :( ... salí corriendo y me tomé la oficina del Gerente, hasta que volvió garantizándome que estaba alucinando porque no la encontró ...  así que me fueron a dejar él y dos "ayudantes" que revolvieron todo hasta que apareció la linda: la agarraron de la cola y yo me pude acostar a leer y descansar tranquila hipnotizada con el sonido del agua...


Distancia recorrida: 235 kilómetros.
Hotel: Bundelkhand Riverside.
Guía: Sukhdeep Singh (msshayam93@gmail.com)




No hay comentarios:

Publicar un comentario